27 nov 2012

Montgròs: Cambio de sentimientos

Las cosas no han salido como un espera, las cosas han cambiado, mi vida ha dado otra vuelta, ha sido un año muy duro, por diferente, por los cambios, por la soledad en la que termina. Es un momento nuevo en el que ha tocado replegarse y dar pasos hacia atrás, pero para coger carrerilla. Ante mi, un nuevo reto de vida, una experiencia más en la mochila, así, que como vi claro el 18 de setiembre, saliendo a correr a las 6:00 mientras Barcelona se despertaba: Es necesario cargar bien la mochila para ir ligero!!

Tras estrenar nueva vida personal y acostumbrarme a que todo sea diferente, tras sentirme feliz por todo lo aprendido y vivido en los últimos años, hay algo que no va a cambiar, algo por lo que siempre luchare para seguir teniendo cerca: el monte, la roca, el mundo vertical. Esto para mi es fuente de paz interior, es lo que me equilibra, lo que me permite expresarme, lo que en definitiva me hace sentir vivo.

Salvando las diferencias que nos separan de los genios, seguir persiguiendo sueños, paredes cada vez más altas, aristas afiladas, vías disfrutonas, rocas y nieves, bosques y sendas, ... A veces lecturas en un momento concreto de nuestras vidas nos regalan grandes instantes, nos permiten reflejarnos en los pioneros y aunque sea a otro nivel, releer "Mi mundo Vertical de Jerzy Kukuczka" me demuestra que solo aquellos que luchan encarnizadamente por aquello que sienten que vale la pena, logran ponerse delante de su objetivo vestidos de alpinistas. Una vez allí, solo queda ser fieles a nuestra forma de hacer monte, vías más o menos duras, caminos más o menos recorridos.

Así que finalmente llegas al punto de tener claro a dónde vas, cómo vas y con quién vas, y en esta ocasión toca acercarse a Montserrat para seguir los pasos de aquellos que conocen este macizo como nadie. Seguir los pasos de aquellos que movidos por la pasión de la montaña no quieren renunciar al tacto con la roca, aunque su edad les diga lo contrario. Ellos son referente para mí, han escalado cientos de agujas, algunos han abierto nuevas rutas y ahora nos ofrecen las Vies Balves. Vias sencillas sin huir del compromiso que implica escalar en Montserrat. Pocos seguros y muchos metros. Nos decidimos por la Aresta Brucs al Montgròs 150m III+. Este proyecto de reequipar persige el objetivo de iniciarse en vias largas o para seguir escalando en la tercer o cuarta edad como explica Joan Cerdà, promotor de la idea junto Enric Sales, Agustí Ventura, Francesc Guillamon y Joan Nubiola. La idea ha sido, valiendose de itinerarios  ya abiertos, vías que permiten al primero encontrar lo justo y necesario para no regalar nada. El colectivo creo que ha logrado de sobras el objetivo, consiguendo que estas vias no pierdan su sello y su caracter.


Esta es la primera imagen que tenemos del Montgrós que aparece en el momento que salimos de El Bruc para dirigir-nos a el Castell, siguiendo las indicaciones, antes de llegar a este punto seguimos hacia Can Jorba. En el cruce caminos dejamos la furgo i seguimos la aproximación a pie.
Remontamos por el Serrat de la Palomera dejando esta a nuestra izquierda para cruzar a la otra vertiente por el Coll de l'Ajaguda 


Seguimos subiendo por la Canal Roja siempre con nuestro objetivo bien presente que va poco a poco va acercandose
Por una senda mas o menos indicada tomamos la base del Montgrós en la parte baja que lo une als Plecs dels Llibres. Punto de inicio de esta via. Nos preparamos y nos encordamos para iniciar esta escalada. Que empieza como todo, con un primer pasito sobre una roca que no dominamos que no nos da nada de confianza pero esto es la roca montserratina y toca irla descubriendo.

Primer largo de unos 45m que sube con tendencia a la izquierda hasta superar un pequeño bosquecillo colgado por una vira que desemboca en una gran fisura donde encontramos la primera reunión muy bien equipada. A partir de aqui sigue recorriendo el gran labio que parte en diagonal la cara Sur del Montgròs.

Vista del primer largo, quiza el más escalable de todos.
Ya en la primera reunión, cómoda como no podia ser de otra manera en una vía de este corte.
Y otra cosa que siempre nos acompaña, y sin la que todo esto no valdría la pena: ver el mundo desde otro punto de vista, y que vistas!!! Vamos tarde, hemos empezado tarde a escalar y no vamos todo lo rápido que quisiéramos. Ya con el horario de invierno toca moverse rápido, esto nos impide seguir haciendo todas las fotos que nos gustaría. 
 El segundo largo disfrutón con la parte más complicada en los primeros metros de salida de la R1. El tercer largo es corto y permite colocarnos correctamente debajo del 4º largo evitando roces innecesarios en el último largo. En este último la verticalidad baja aun más, pero es largo de unos 40m que nos deja dabajo de la bola que corona el Montgròs 1133m. Con magnificas vistas a todo el Macizo de Montserrat


Salimos de la ultima reunión contentos de los largos disfrutados, nos desencordamos para afrontar el tramo final que nos lleva a la cumbre. Vamos muy tarde són la 16h, tenemos 2h para salir del monte. La luz es de tarde y de que nos coja la prisa, pero también és una luz màgica para conocer un lugar nuevo. Momento màgico para un encuentro màgico con una montaña que siempre me ha provocado sentimientos contrarios, pero que hoy finalmente me ha enamorado.
 Gran vista sobre la región de Les Agulles. En la cumbre panorámicas excelentes del Alfonsin!!


Ahora empieza una loca contrarreloj montaña abajo para llegar antes de que se haga de noche, no llevamos frontales, así que hay que llegar si o si. Bajamos por la cara NE del Montgròs hasta la Canal del Migdia con la intención de tomar el Camí dels Francesos, pero nos lo saltamos. Y sin comerlo ni beberlo nos metemos en la Canal del Joc de l'Oca. Un sinfín de cadenas, cuerdas y rapeles de vértigo aliñados por la prisa que nos mete el Sol que poco a poco se apaga.


I finalmente llegamos con el último rayo de luz a Can Jorba, y lo del último rayo de luz es lo más literal posible, desde la masia tomamos la pista y después de 10 minutos llegamos a la furgo. Estamos contentos, satisfechos y con una ligera sonrisa en nuestros labios por que sabemos que hoy hemos empezado un camino unidos por cuerdas y por la manera de entender esto.
Fotos prestadas por el Búlgaro bigotudo

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